Ramón es un tipo normal (si es que los periodistas pueden serlo). Sólo se le ha complicado su vida al perder a su mujer y su trabajo. Una historia cotidiana, hasta que presencia un asesinato y tiene que huir... Este es el libro que Patxi Freytez empezó como terapia, que no supo cómo dejar y del que me hablaba tantas veces. Soñaba con publicarlo pero no daba con la editorial que se atreviera.
Junta varios ingredientes que hacen que la historia se haga compleja, pero a la vez la hacen creíble (repito, es la complicación total de la vida de un tipo normal y corriente). El libro no trata sobre la vida de Patxi, pero ahí están sus vivencias, sus barrios, su gente, la radio... y le añade la capacidad que tiene como actor de cine y teatro para visualizar y narrar. Para encontrar el momento, para parar en seco y para retomarla.
Por cierto, hay malos, malísimos, pero cuidado, no sólo saben hacer daño o incluso matar, tengan motivo o no. Son malos con aristas, con rodaje y argumentos para ello, si bien, sorpresa, tienen sentimientos embrutecidos aunque ocultos para los demás, pero existentes y que aparecen cuando no hay más remedio.
Como comentaba tenemos una trama normal, lineal, una sucesión de hechos, pero hay que estar atento y despierto. Patxi cuenta la historia de los personajes cuando quiere. De cuando en cuando nos mete flashbacks que nos explican, al más puro estilo de Tarantino, su origen. Cuando te has resignado a imaginar quién es y qué le ha pasado Esther o qué punto de locura ha conseguido Juanote y sus andanzas como neonazi, o por qué Aintzane vive tan lejos de tu tierra. Da igual el momento de nuestra historia.
No me he leído muchos libros como este. Espero que Patxi siga sacando esa creatividad que lleva dentro. Un libro, una obra de teatro, una película o lo que sea... en espera de lo que lo vuelva a hacer, ahí tenemos "la balada del langostino".
Ya no quiero destriparlo más. Buscadlo y leedlo.
Un saludo del Abu